San Antonio de los Baños cuenta con una consulta de Endocrinología, donde se asiste a personas con varias enfermedades de esta especialidad incluyendo la Diabetes Mellitus. Cada día crece la cifra de personas aquejadas con trastornos de tipo endocrino.

“Es común escuchar a los médicos decir que todo entra por la boca”. La diabetes es prevenible. Esta enfermedad se caracteriza por un aumento de la glucosa en sangre (hiperglucemia). Es importante controlarla, ya que sus complicaciones pueden afectar a diversos órganos como riñones, nervios, corazón y circulación sanguínea. Por esta razón conviene vigilar más lo que comemos, para evitar males mayores. Debemos comer según la actividad diaria que realizamos. Si gastamos mucha energía, debemos consumir más alimentos.

Existe una frase popular que dice “Hay que comer para vivir y no vivir para comer”. Las personas con diabetes no metabolizan los azúcares de forma normal. Por eso, deben limitar los alimentos que contengan hidratos de carbono. Afortunadamente, el tratamiento con insulina y sus diferentes tipos de acción (rápida y lenta) ha logrado, no sólo que las personas puedan alargar su vida, sino que sea normal a la de una persona sin diabetes.

En los diabéticos es fundamental limitar y repartir los alimentos ricos en hidratos de carbono a lo largo del día para favorecer un adecuado control glicérico. Deben contar las raciones de los alimentos ricos en hidratos, ajustarlos a la medicación, la actividad física y las costumbres. Las causas de esta dolencia son fundamentalmente, genéticas y relacionadas con hábitos alimenticios incorrectos.

La diabetes es la primera causa de ceguera en muchos países». De hecho, «cerca de una tercera parte del total de adultos que padecen la enfermedad acabarán desarrollando alguna forma de retinopatía diabética, complicación que puede derivar en baja visión o ceguera”.

Existen en el mundo muchos individuos con esta enfermedad metabólica. Por eso se dice que hay más diabéticos que pelirrojos. Los pelirrojos representan menos de 1% de la población, mientras que los diabéticos representan el 6%, según la Organización Mundial de la Salud.

Los diabéticos deben conocer a la perfección su patología. Esto los ayuda a sentirse cómodos en cualquier situación. Dentro de los estrictos horarios que necesita una persona con diabetes, las personas que lo acompañan, son una parte fundamental, ya sea que los guíen a desayunar siempre a la misma hora, o recordándoles que hagan un control de los niveles de glucosa.

Si vigilamos lo que comemos y balanceamos bien nuestros alimentos, contribuiremos en mayor medida, a mantenernos sanos.

Olga Álvarez Suárez
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