Villena: luz en el camino de la historia nacional

El 16 de enero de 1934, víctima de la tuberculosis, fallece el joven Rubén Martínez Villena.

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Por Rosicler Quiñones.

Martínez Villena fue abogado, escritor y consagró gran parte de su vida a la lucha revolucionaria.

Entre los hechos que cuentan sobre él, hay uno que narra un encuentro con Máximo Gómez. Cuando el pequeño Villena, de 3 años, iba con el padre en un tren conoció a Gómez quien quedó impresionado ante la mirada del niño y dijo: «tu vida tendrá luz plena de mediodía».

Rubén Martínez Villena nació el 20 de diciembre de 1899 en el poblado de Alquízar. Cuando era un niño aún su familia se trasladó hacia la Habana, donde realizó sus estudios primarios. Con tan solo 11 años escribió sus primeros versos.

Posteriormente ingresa en el Instituto número 1 de la Habana. Cursa el Bachillerato en Letras y Ciencias y se gradúa en 1916. Luego comienza la carrera de Derecho Civil y Público en la Universidad de La Habana, donde conoció a Pablo de la Torriente Brau y a Julio Antonio Mella, jóvenes que estaban unidos por un mismo ideal: lograr la independencia de Cuba.

Era un escritor privilegiado por lo que las revistas habaneras comenzaron a publicar sus poemas. Un hecho ocurrido en la Habana en 1923 hizo que la figura de Villena cobrara notoriedad. Fue la protesta de los 13, donde denunció la corrupción existente en el país.

Participó además en la fundación de la Falange de Acción Cubana y de la Liga Antiimperialista de Cuba. También se destacó en la realización de huelgas y enfrentó abiertamente al gobierno de Gerardo Machado, a quien nombró «el asno con garras».

Hacia el año 1929 Villena ya presentaba problemas de salud, estado que no le impidió continuar su labor revolucionaria, pues elaboró artículos manifiestos y pronunció varios discursos.

En ese entonces sale hacia Nueva York y luego se dirige a Moscú para participar como delegado de la Confederación Nacional Obrera de Cuba, en el Congreso de la Internacional Roja.

En la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas ingresó en el sanatorio por tuberculosis y tras un diagnóstico desesperanzador regresa a su patria. A pesar de su enfermedad dirigió la huelga general que derrocó el gobierno de Gerardo Machado.

Rubén Martínez Villena perdió su batalla contra la tuberculosis a los 34 años. El niño, joven y hombre que fue, con esa luz de mediodía que profetizó el Generalísimo, iluminó con su labor incansable, su verso encendido y palabra filosa gran parte del camino de la historia nacional.