Homero Perdomo interpreta el monólogo "Yo, Cuinco". Al fondo una caricatura de Boligán. Foto: Orlando Carrió.

Por: Estela Jorgelina López Valladares; Yaraí Mazola Concepción; Naivis Ramos Rodríguez y Vilma Portales Hernández. Estudiantes de Gestión Sociocultural para el Desarrollo.

Introducción.

San Antonio de los Baños se le conoce como ¨La Villa del Humor¨ y tiene su nombre bien ganado. En la localidad se encuentra el único museo del Humor con que cuenta el país, se viste de gala cada dos años para celebrar la Bienal Internacional del Humor Gráfico alternando con el Salón Nacional de Humorismo y Sátira, el que genera las fiestas populares conocidas como Humoranga; pero no solo por eso se hace merecedor del calificativo entre otros aspectos porque los nacidos en la Villa son los que preparan estos eventos con júbilo y entusiasmo, teniendo  gran sentido de pertenencia, a tal punto que han hecho del humor patrimonio intangible e identitario de San Antonio de los Baños.

A través del tiempo la población ha demostrado su gran sentido del humor, arraigado en la región, involucrando a gran cantidad de pobladores, poniendo a prueba el ingenio, sabiduría y creatividad que poseen. En el terruño se han destacado personas que ponen en alto a la localidad, obteniendo resultados satisfactorios y reconocimientos por realizar trabajos vinculados al humor en nuestra nación y fuera de ella.

Existen varios ejemplos que caracterizan la idiosincrasia de los ariguanabenses y en especial el caso de Cuinco que tuvo gran protagonismo e impacto social donde se sumaron diversos coetáneos para disfrutar de toda una puesta en escena sobre una idea improvisada, disfrutando del humor criollo de la región.

Desarrollo.

Con este trabajo el objetivo que se persigue es demostrar la fuerte tradición humorística de los naturales de San Antonio de los Baños a través de varios eventos ocurridos en el siglo XX en la década de los 80 que guardaron relación con una persona de la localidad.

Si hablamos de José Ignacio Pérez Martínez es poco probable detectar quien fue pero si mencionamos Cuinco seguramente todos los que vivían en aquella época lo recordaran, ya que él forma parte de las memorias del pueblo.

Él fue un hombre poco conocido antes de sus 72 años, era alguien sencillo, de escasos recursos, sin familia que vivía en habitaciones para hombres que estaban ubicadas en altos, frente al conocido parque central que lleva como nombre José Martí. Se buscaba el sustento como pintor de casas o como es común llamar a los trabajadores cubanos que desarrollan ese oficio “pintor de brocha gorda”. Según Julia M. Hernández que se desempeñaba como trabajadora social durante la filmación de un documental dedicado a él y realizado por los estudiantes de La Escuela Internacional de Cine y Televisión en entrevista hecha a la funcionaria plantea que él por sus bajos recursos padecía una pobreza extrema.

En ese documental nombrado “Los Regalos de Don José” a través de entrevistas explica como lograron sacar del anonimato a Cuinco y cómo se desarrollaron estos hechos que terminaron haciéndolo una persona feliz y reconocida, sintiéndose importante. Todo esto no se hubiera logrado sin la gran amistad que existió entre él y José Rodríguez propietario de la finca “La Tojosa” que llegó a sentir que era parte de su familia y estaba inmerso en el último experimento realizado en Cuba de economía privada. Él creía ciegamente en su amistad con tan noble señor que lo proveía de alimentos, ropas, equipos eléctricos y de otras cosas que solía enviarle para que él disfrutara.

Solía hablar con su amigo por teléfono; nunca pudo verlo porque supuestamente tenía muchas tareas que cumplir en su trabajo, pero lo que si le llegaba habitualmente eran los productos y ayuda de la finca por lo que quizás no hizo hincapié en desear verlo con insistencia, le bastaba quererlo mucho, ser feliz mientras hablaba con él y hacerle saber de manera familiar lo mucho que lo estimaba.

Realmente, ¿quién era Don José? Según Delio Pinos, que conocía desde la infancia a Cuinco y sabía que su credibilidad no poseía límites se le ocurrió decirle que tenía un amigo que gozaba de un caudal de recursos debido al trabajo que se encontraba realizando y se lo presentaría por vía telefónica. Así comenzó la gran amistad y a medida que pasó el tiempo se fue afianzando. Don José era una persona muy buena y sentía gran admiración por la gente honesta y si bien él no podía venir, si mandaba con frecuencia a su esposa Caridad que se encargó de asegurar la existencia de la finca y de su cónyuge por lo que comenzaron a llegarle los presentes de dicho sitio desde las Villas.

Así comenzó la broma que le prepararon a Cuinco en el que muchas personas del pueblo estaban confabulados, se recogía dinero y le hacían llegar provisiones, le compraron un televisor y le dijeron que el señor Don José se lo había mandado a colores pero que alguien se lo había cambiado por uno en blanco y negro y también lo creyó a pesar de que se molestaba cada vez que hacía alusión al incidente lo cierto es que disfrutaba mucho verlo sobre todo cuando pasaron la telenovela Brasileña “Doña Bella”.

En cuanto a la finca la cual era objeto del experimento le decían que allí se cosechaban piñas, plátanos y malangas, asimismo existía una fábrica de dulce en conserva y otra de queso. Había una textilera y la propiedad poseía una bahía donde entraban los barcos por la parte trasera. Así le fueron pintando en su imaginación ese lugar que lo creyó y lo repetía con gran admiración, puesto que los productos que llegaban de allí traían el sello de la marca de la finca, se veía “Finca La Tojosa” Las Villas. KM 7. Carretera Palmira. HECHO EN CUBA. Era tanta la sincronía entre todos los que estaban inmersos en hacerle creer a Cuinco que Don José existía que hasta en eso pensaron, la presentación del sello de la marca de los productos de la finca, esto lo hacía Alfonsa Cárdenas quien en esa época era la administradora de la imprenta.

Llegó el día que hubo que realizar un juicio porque algunas personas le hacían fechorías, en las mañanas llegaban alimentos enviados desde la finca “La Tojosa” pero por la tarde al llegar del trabajo habían desaparecido.

En entrevista hecha a Estela Pérez quien se desempeñaba en aquella época como subddirectora de la Casa de Cultura “Raimundo Valenzuela” narra que el juicio fue realizado y coordinado por Félix Santos conocido en la localidad como Dardo en esos momentos era el director de Los Cuenteros. Él se encargó de realizar y llevar a cabo la puesta en escena donde se integraron personas que no tenían vínculo con el teatro y tampoco eran artistas aficionados sino formaban parte del Ariguanabo. Allí estuvieron en el banquillo de acusados:

Julio de Jesús González. Alias Cocuyo.

Dagoberto Morales. Alias Tiburón.

Ramón Llanes. Alias El Grillo´

Omar Travieso. Alias Alicate.

En entrevista Omar Travieso, uno de los acusados que diera en un sitio electrónico ya que se considera una personalidad en el Ariguanabo, recuerda como Dardo organizó el juicio y que también representó al abogado y cuando se dirigió a él y le dijo que se parara correctamente las risas fueron generales y a carcajadas porque en su condición era imposible asumir una postura esbelta ya que él tenía condiciones de nacimiento que no se lo permitían. El juicio fue ejecutado en la Sala Teatro de la Casa de la Cultura y hubo personas que tuvieron que quedarse afuera debido a que el local se encontraba repleto.

El juicio lo ganó el demandante que era Cuinco y los malhechores fueron sancionados por el fiscal Pedro Moreno. Las penas que le impuso el tribunal fueron una semana sin salir de la casa y tres días sin visitar la plaza.

Así fue como poco a poco las bromas se fueron incrementando sobre una idea y haciéndose cada vez más elaboradas con el apoyo de todos los que estaban involucrados en los que se encontraban Delio Pino, Rosendo Ruiz; también con instituciones del municipio como la Policía, el Poder Popular y los Bomberos.  En entrevista a Isel Chacón exdirectora del Museo del Humor refiere que en esa época estaban asociados a esos eventos todo lo mejor de la cultura Ariguanabense ya que muchas de las visitas que recibía Cuinco las asumían algunos de los artistas del patio y en efecto todo fluía a las mil maravillas existía una sincronía perfecta.

Entre los eventos más recordados tenemos:

_La entrega de la orden del camello dorado y del diploma por haber ganado el juicio.

_La visita de Candiña que la asumió el actor, instrumentista y cantante Orlando Santana conocido como Landy y el hermano de  Humpherey Bogart actor americano de Hollywood.

_La visita de Doña Bella en el Parque Central donde se dieron cita más de 700 personas y también participaron los bomberos para darle más credibilidad ya que el propio Cuinco cuenta como les avisó para que lo ayudaran haciendo un cordón para que la distinguida dama pudiera pasar. La muchacha que vistieron según Julio de Jesús González conocido como Cocuyo se llamaba Maritza y cuenta que la pusieron casi igual mediante la técnica de maquillaje que aplicaron a tal punto que muchas personas creyeron que era verdad.

_La visita de una japonesa cantante, un samuray y Caridad la elegante esposa de Don José por motivo de su cumpleaños 76 que lo celebraron en el Museo del Humor. Interpretaba a la japonesa el reconocido actor Osvaldo Doimeadiós y a Caridad el querido actor ariguanabense y director de “Los Cuenteros” Dardo.

No solamente las artes escénicas estuvieron vinculada a estos eventos también el joven caricaturista Ángel Boligán aportó su ingenio haciéndole creer a Cuinco que había hecho y vendido caricaturas de él en otros países obteniendo grandes sumas de dinero.

Se cuenta también que cierta vez fue a cobrar un cheque de 5 000 pesos al banco y al llegar la empleada le dijo que ese cheque ya lo había cobrado una persona que había venido con un autorizo y lo abalaba su firma y se fue directamente al Poder Popular a realizar la queja de la estafa. En entrevista al padre Félix párroco de la Iglesia Católica del pueblo explica que el caso de Cuinco hubiera sido perjudicial decirle la verdad porque vivía esa fantasía como su realidad.

Poco tiempo después sin haber terminado el documental por el brasileño Wolne Oliveira muere Cuinco de un infarto por lo que se incluyen las imágenes de su entierro donde Homero Perdomo despide el duelo, viéndose como gran cantidad del pueblo lo acompañó hasta su última morada.

Años después se crea el premio Cuinco que se otorga en los salones de caricatura Juan David, es colateral y lo entrega la Dirección Municipal de Cultura. Siempre se realiza en la primera quincena de diciembre. En el 2023 se dio de manera excepcional en saludo a los 230 años de la fundación de la Villa San Antonio Abad que fue en el año 2024.

Conclusiones.

Con este trabajo se pretende resaltar el valor humorístico de la villa ariguanabense a través de algunos de los hechos que tuvieron lugar durante ese período de tiempo y el gran impacto social que llegó a tener, nada hubiese pasado si no hubiese existido los deseos de hacer humor, de pasar un rato agradable y de hacer el bien porque lo cierto es que nadie podía decirle a Cuinco que Don José no existía, los que tuvieron la osadía de hacérselo saber salieron quizás más disgustado que el mismo Cuinco porque respondía que eso era envidia que le profesaban ya que recibía regalos y que muchos deseaban tener esa amistad con el dueño de la finca a tal punto que llegó a comparar la grandeza de Don José con Fidel. Todos los hechos ocurridos vinculados con Cuinco forman parte de la cultura ariguanabense quedando arraigado en el recuerdo del pueblo.

Este trabajo constituye el inicio de una investigación que permitirá una mayor aproximación al papel desempeñado por este personaje en el humor popular de la Villa.

Bibliografía

Documental:”Los Regalos de Don José”

Sitios Electrónicos: https//oncubanews.com: cultura Cuinco y Doña Bella en la Villa del Humor.

https//www ariguanabo.gob.cu: Personalidades y Personajes Típicos.

Entrevistas:

  • Estela Pérez. Directora jubilada del Museo Municipal.
  • Isel Chacón. Directora Jubilada del Museo del Humor.
  • Julio de Jesús González. Poblador de San Antonio de los Baños vinculado a los hechos.

 

 

 

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