El XI Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes fue un evento juvenil de carácter mundial celebrado en Cuba en el verano de 1978. Como parte de las actividades del evento, se inauguró en nuestro municipio el 18 de  abril  de 1978 el Anfiteatro XI  Festival.

Ubicado en las afueras de san antonio de los baños, en la Calle Ancha y final, entre 21 y 19, la institución tiene una  capacidad y condiciones para espectáculos  superior al de la avenida del puerto y al de marianao. Muchos eventos provinciales de la música y la cultura tuvieron como escenario al gigante de las afueras del pueblo. Sin contar, las películas de estreno disfrutadas desde sus  gradas,  por los pobladores de la villa.

El paso del tiempo por el lugar se hizo notar. Se convirtió en una ruina irreconocible, expuesta al saqueo y al deterioro. De la amplia pantalla donde se proyectaban filmes solo quedaba un enmohecido esqueleto de hierro. Algunos de los bancos de cemento desaparecieron y en esos palcos al aire libre crecía la yerba. Donde estuvieron los pequeños camerinos y los baños se improvisaron viviendas por personas que llegaban.

Los esfuerzos y el silencio por rescatar el lugar estallaron.  A pocos días de que concluyera  el año 2016, llegó Silvio Rodríguez, a su ciudad natal, para protagonizar el concierto 78 de la Gira por los Barrios. Era viernes y en la tarde- noche fue reinaugurado  entonces un espacio que durante años reclamaron los ariguanabenses.

Poco más de las 6 de la tarde, subió al escenario el trovador y de nuevo el anfiteatro se vistió de gala. Silvio  no  pudo  marcharse de su terruño sin complacer a los presentes con su tema Ojalá, ideal para  despertar la esperanza que incluía desde salvar un río hasta salvar el patrimonio de la Villa del Humor.

Desde entonces El Anfiteatro rejuveneció y diversas actividades se han realizado allí. Recordamos cuando el pasado año la Colmenita, el «Team Cremata» visitó el lugar. Fue una mañana inolvidable pero ni el intenso sol pudo impedir las risas, los bailes y la alegría que caracterizó la jornada.

Perooo, que nos resta ahora? Pues Corresponde cuidarlo para que mantenga intacta su estructura y la frescura de  los tiempos. Cuidemos nuestra historia y las obras más emblemáticas que forman parte de ella. No dejemos que recaiga en las ruinas y en marginalidad. Conservemos la vitalidad que en algún momento determinaron su nombre Anfiteatro XI  Festival. 

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